La novillada de Baltasar Iban nos ha dejado los momentos más entretenidos del Alfarero de Oro hasta ahora. Entre los virtudes del encierro ha destacado la transmisión, la humillación y las serias hechuras que dieron la impresión de estar viendo una corrida de toros. Los tres novilleros han puesto toda la carne en el asador intentando aprovechar de las cualidades de sus oponentes. Tulio Salguero lidió tres toros después de que Alejandro Fermín se retiró a la enfermería tras la faena al segundo. Juan de Castilla hizo una buena faena al quinto y Alejandro, pese a solo lidiar un novillo dejo detalles muy importantes para el recuerdo.
Tulio Salguero es un nombre para tener en cuenta. Pese a que esta fue su segunda novillada del año estuvo responsabilizado matando los tres novillos que le tocaron y lo hizo con solvencia, seguridad, valor, voluntad y la cabeza en su sitio sin despreciar ninguna oportunidad. Se puso delante del primer novillo, con hechuras de toro, con el capote detrás de la espalda para torear por gaoneras pero no abrió suficientemente la tela y la res la pegó una fea voltereta. Volvió instantáneamente a la cara del novillo para completar su quite y lo hizo esta vez con seguridad y valor. En esta primera faena se le ve muy solvente ligando series por ambos lados con ritmo y seguridad en sí mismo. La faena solo se deslucido porque el novillo se desentendió y se defendió cada vez más durante el transcurso de la faena. Pincha antes de matar y da una vuelta al ruedo.
Supo aprovechar también las dos oportunidades que le quedaban por el percance de su compañero de cartel. El cuarto tenía más obediencia y uniformidad en las acometidas que supo aprovechar volviendo a ligar buenas series de temple y ligazón pasando al novillo con el compás abierto. La estocada fue efectiva pero el novillo tarda en hecha res. Toreó bien a la verónica al sexto que embiste muy apretado en el primer serie de la faena. Se descubre Tulio al natural pegando pases de buen gusto y trazo largo en una faena muy bonita. Acaba su actuación con una soberbia estocada que provoca leve petición de oreja en los tendidos.
Alejando Fermín solo pudo matar el segundo de la tarde por una lesión producida cuando entraba a matar, no obstante lo hizo muy bien demostrando que tiene las ideas muy claras y que sabe torear bien. Su recibo de capote toreando a la verónica con los pies juntos para terminar con chicuelinas de rodillas fue bien recibido por el público. Comienza la faena toreando al natural con la mano muy baja y llevando al novillo despacio en pases bellos para seguir la faena por la derecha toreando con la figura más erguida. Se perfila para matar con el estoque en la mano izquierda pero sin mucha suerte, en un intento de estoquear el novillo pincha en hueso saliendo de la suerte dolorido y cogiendo el hombro y los peones le llevan a la enfermería.
Juan de Castilla tocó pelo con el quinto de la tarde pero el presidente volvió a causar polémica negando a concederle el trofeo. Este quinto novillo fue un ejemplar con poder que derrotó con fuerza a las tablas y empujó en el caballo. En el último tercio el novillo tiene recorrido y transmite a los tendidos. Juan lo aprovecha toreando en redondo con mando y seguridad dirigiendo la embestida de su adversario con temple y ritmo en una exposición de su dominio. Termina con redondos invertidos y es efectivo con el estoque. Da una merecida vuelta al ruedo con mucha polémica en los tendidos. Al primero de su lote lo toreó bien con el capote. Pese a que no entregó el novillo él de Castilla lo llevó cosido y templado en la muleta sacando naturales muy profundos. Destacó Fernando Sánchez en el tercio de banderillas.
Antes del paseíllo tuvo lugar un momento muy bello e íntimo cuando se inauguró una placa en honor el recientemente fallecido Victor Barrio que ganó el Alfarero de Oro en 2010.
Imágenes de Castilla-La Mancha TV.
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